Esta tradición ya va por su tercer año y cada vez que terminamos el ride llegamos a la misma conclusión, el año siguiente va a ser menos exigente. Y este año no fue la excepción, y de hecho fue la peor embarcada hasta el momento. Había un trayecto de unos 6-7 kms que no conocía y se convirtió en una caminata por media montaña con la bicicleta al hombro. Al final una ruta que estaba planeada de 57 kms, la tuvimos que recortar a 48kms por las razones ya antes mencionadas. El próximo año vamos a planear una vuelta a la manzana, se los prometo.

Aquí les dejamos la evidencia, no hay muchas secciones rápidas pero si mucha caminata al principio. Gracias a la grupeta ELENGA que se apunto este año: Felipe, Gabriel, Jose, Octa, Mark y ELENGA.