Hay una emoción que lo embarga a uno de saber que va para las zonas mas lindas del país a disfrutar de un deporte que tanto ha disfrutado, pero al llegar y toparse con condiciones poco favorables para los competidores, es sinceramente frustrante. En nuestro caso, vamos a hablar de la distancia de 50 km (fue la que hicimos).

Por lo general, uno cuando empieza un trabajo, empieza con mucha dedicación y ganas de superarse, pero a veces, el empleador va recortando presupuesto, poco a poco va quitando beneficios y la cosa cambia por completo. Algo así ha venido sucediendo con carreras de MTB. Antes uno veía los paquetes de las inscripciones llenas de productos patrocinadores, barritas, semillas, galletas, geles, hidratantes, etc etc. Y tal vez el hecho de haber participado en este evento en ocasiones anteriores pone las expectativas igual.

Para nuestra fortuna, el paquete solo traía la camisa del evento, varios volantes de publicidad, un sticker, un gel y un cupón de descuento de CRBicis (este si vale la pena), solamente eso. En años anteriores me recuerdo que daban una gorra, un tarro de mani, hidratantes, geles, galletas, etc. etc. y muchas otras cosas mas.

Pasando a la carrera. Los primeros 25 kms super divertidos y rápidos. Llegamos al puesto de asistencia, que por lo visto apenas estaban llegando por que estaban bajando la asistencia de un pickup, habia un niño ayudando y yo solo pedí agua, no se si había hidratante o algo mas, en ese momento solo necesitaba agua. Según me dijeron, gente que paso mucho antes que yo, no había nada de asistencia.

Luego de ahí se recorrían varios kms hasta pasar un río bastante agitado (agua hasta el pecho) con la bici en un brazo y el otro agarrado de un cable. A las mujeres (cuando yo llegue) les estaban pasando la bicicleta. Pasando este río empezó un trillo bastante complicado, demasiado barro, y muy técnico, muchas raíces de árboles, mucha piedra y muchos sectores poco pedaleables, lo que corta el ritmo considerablemente y es mucho mas cansado.

Para ponerlo en perspectiva, en los últimos 25 kms duramos el doble de tiempo que en los primeros 25. Y para los últimos no hubo asistencia de nada. Se suponía que había 2 puestos de asistencia pero solo existió 1. A la salida del río había un buen samaritano, creo que andaba dándole asistencia a alguien, pero ese señor nos salvo con el agua mas fría que mi garganta ha probado en mucho tiempo.

Ahora a la premiación. A las 11 am se vino el diluvio y toda la estructura de la premiación se vino al suelo por el agua, empezaron a dar los podios a las 11:30 am, una hora después yo me retire y ahí seguían. No me consta por que no estuve ahí, pero aparentemente la premiación fue terminando a las 5pm. En resumen, me parece mucho desorden todo esto de la entrega de premios y una falta de respeto con los participantes no cumplir con la asistencia previamente ofrecida. Es una lástima por que la ruta de este evento es de las mas lindas del país.

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